4 estrellas

2022-12-21 16:31:40 By : Ms. Wanda Chen

A no ser que estés dispuesto a gastarte mucho dinero en un robot aspirador, siempre te tocará hacer algunas concesiones. Renunciar a un buen sistema de navegación. Decir adiós a una base de aspirado automatizada. O incluso olvidarte de la función de mopa. Pero el último Proscenic M8 Pro ha sabido combinar muchos de esos elementos y mantener un precio tremendamente competitivo.

Por si esto fuera poco, Proscenic se ha guardado un pequeño as en la manga en para aquellos que no son tan tecnológicos: un simple y sencillo mando a distancia. Quizás para ti no sea más útil que controlar el robot a través de su app o incluso mediante comandos de voz, pero le habilita un mundo de posibilidades a aquellas personas —mayores, principalmente— que no atinan a manejarse bien con su smartphone. Después de probar varias semanas este robot, me atrevo a decir que los ingenieros de Proscenic lo han diseñado con todo tipo de usuarios en mente.

El M8 Pro quizás no sea el mejor robot aspirador del mercado, pero consigue incorporar muchas funciones interesantes y manteniendo un precio comedido. ¿Podemos realmente pedirle mucho más?

El M8 Pro quizás no sea el mejor robot aspirador del mercado, pero consigue incorporar muchas funciones interesantes y manteniendo un precio comedido. ¿Podemos realmente pedirle mucho más?

El robot en sí no te parecerá muy distinto de cualquier otro que hayas visto antes: se trata de un disco de 35 centímetros de diámetro que mide casi 10 centímetros de alto en su parte más elevada (desde donde sobresale el sensor LiDar) y que cuenta con tan solo dos botones, uno de encendido/apagado y otro que enviará al robot a la base de carga.

Rechargable and reusable These here are electric hand warmers that are rechargeable and reusable. They provide up to 12 hours of heat on a single charge and you can control the specific heat levels they are outputting.

Si le damos la vuelta, nos topamos con un depósito 2 en 1 donde se almacena la suciedad que va recolectando el robot y donde también se encuentra el tanque de agua que humedecerá la mopa durante el fregado. Si queremos que el robot friegue además de aspirar, tendremos que colocar el accesorio especial de la mopa y acordarnos de echar agua al depósito.

El M8 Pro viene con una base de carga y de vaciado automático que se encarga de vaciar el depósito de suciedad que trae el robot cada vez que éste acaba de limpiar. Según los cálculos de Proscenic, la bolsa que trae en su interior debería aguantar unos dos meses antes de llenarse por completo, aunque la frecuencia variará en función del uso que le des y las dimensiones de tu casa.

Que el robot cuente con una base de autovaciado no significa que no tengas que hacer un pequeño mantenimiento de vez en cuando. Siempre que el robot termine de fregar, no te quedará más remedio que quitarle la mopa y vaciar el agua restante del depósito si no quieres que vaya goteando poco a poco por la parte de abajo. También es posible que te toque extraer el rodillo alguna vez para quitar algunos pelos enredados (sobre todo si tienes mascotas en casa), pero afortunadamente es tan fácil como apretar una simple pestaña para desencajarlo. Mi única pega del diseño del robot es que sea necesario un destornillador para soltar su cepillo giratorio.

Una cosa que me ha sorprendido para bien del M8 Pro es su sistema de navegación. Gracias a su sensor LiDAR, el robot es capaz de mapear perfectamente las habitaciones y de detectar obstáculos antes de golpearse con ellos. De hecho, cuando el robot parece dudar, como cuando está cerca de las patas de una mesa, ralentiza la marcha y se choca hasta con suavidad contra ellas. Pero lo mejor de todo y lo que habla bien de su sistema de navegación es que en todo este tiempo de pruebas no he tenido que rescatar al robot de ningún lado donde se haya quedado atrapado.

La limpieza del M8 Pro es metódica. Una vez que hayamos seleccionado uno de sus tres niveles de succión (Eco, Estándar y Max), el robot irá serpenteando por la habitación hasta haberla limpiado por completo, y más tarde pasará a la siguiente. A pesar de que consume más batería, he optado siempre por el modo Max, ya que es el único que ha podido aspirar los restos de suciedad más grandes del suelo y, sobre todo, los que caen sobre la alfombra.

El sistema de fregado funciona prácticamente igual que el de succión. Podemos elegir entre tres niveles de intensidad diferentes y el robot irá haciendo pequeños desplazamientos adelante y atrás para desincrustar mejor la suciedad del suelo. Por lo general cumple bien con su cometido, pero hay alguna cosa con margen de mejora.

La primera y más importante quizás sea el sistema de detección de alfombras. El M8 Pro cuenta con un sistema automático que debería detectar cuando está subiéndose a una alfombra para aumentar la potencia de aspirado. Esto no ha ocurrido con la alfombra de pelo corto de mi salón. Tampoco este sistema me ha valido para evitar que trate de fregar esa parte de suelo cuando estaba la mopa colocada sobre el robot. Por lo que si vas a utilizar esta función, mejor que marques bien en el mapa por donde no debería pasar. Además, dar con los límites exactos de dónde se encuentra tu alfombra sobre el mapa es una especie de proceso de prueba y error. Sería todo más sencillo si el robot supiese identificar automáticamente dónde se encuentran las alfombras y evitar pasar por encima (o incorporar un sistema de mopa elevable).

Y puestos a pedir, también podría ser interesante que tuviese un tanque de agua estanco que aguantase varios usos y no tuviera que ser vaciado cada vez que termina el robot de fregar. Pero bueno, no dejan de ser reclamos menores.

Proscenic ha diseñado una app bastante completa desde la que podemos manejar todos los parámetros del robot. Desde ahí tenemos la oportunidad de seleccionar la intensidad de aspirado y de fregado, marcar horarios de limpieza automáticos, editar el mapa de nuestra casa o ver el estado de las distintas piezas del robot. Quizás aquellos que tengan una casa de varias plantas echen en falta que la app pueda almacenar varios mapas, pero por lo demás, no tiene ninguna carencia relevante.

También comentamos al principio del análisis que el M8 Pro se había guardado un as en la manga para los amantes de lo analógico: un simple y sencillo mando a distancia. Con este mando podrás definir la potencia de aspirado, decirle al robot que limpie o friegue, o que vuelva a la base. La mayoría de personas preferirán controlarlo por medio de la app o por controles de voz, pero está bien que exista esta opción para ponerlo al alcance de los menos tecnológicos.

Respecto a su autonomía, no creo que se te quede corta a no ser que vivas en una casa enorme. Para tus cálculos: el M8 Pro ha tardado 27 minutos en limpiar (a plena potencia) unos 25 metros cuadrados de mi casa, y al terminar todavía le quedaba un 90% de su batería de 5200mAh.

Este robot aspirador quizás no sea el más potente de su clase, pero trae un buen puñado de funciones consigo. Cuenta con un solvente sistema de navegación, te ahorrará unos cuántos viajes a la papelera gracias a su base de vaciado automático y limpiará y fregará tu casa siempre con fruición. Y por si estos no fuesen suficientes argumentos, también cuenta con una app solvente e incluso un mando a distancia que lo hace accesible a las personas mayores. Con este precio, poco más le podemos pedir.